La prohibición no infringía el “derecho a la libertad de expresión”, porque cubría la “difusión de propaganda” en apoyo de la agresión militar de Rusia por parte de un medio financiado íntegramente por el Estado ruso, dijo el tribunal en su veredicto del miércoles (27 de julio).
El tribunal declaró que la medida era de “interés general” porque tenía como objetivo “proteger el orden público y la seguridad de la Unión, que se ven amenazados por la campaña de propaganda sistemática puesta en marcha por la Federación Rusa”.
También era “proporcionada” dado lo mucho que estaba en juego y dado el carácter “temporal y reversible” de la prohibición de difusión, añadió el tribunal.
La prohibición de la UE, promulgada el 1 de marzo, fue impugnada por RT France, que también alegó que el Consejo de la UE no era competente en estas cuestiones y que ignoró su “derecho a ser oído” antes de seguir adelante.
Pero el tribunal dijo que, dado que Russia Today y RT France emiten en toda la UE, las medidas contra la propaganda “pueden realizarse mejor a nivel de la UE que a nivel nacional”.
Y añadió que, dado que Russia Today estaba animando la guerra mientras se desarrollaba, “la aplicación inmediata de medidas” era más importante que escuchar los argumentos de RT France.
El veredicto del Tribunal General se produjo sólo cuatro meses y 19 días después de que se presentara la denuncia en el marco de un “procedimiento acelerado”, mientras que los casos normales tardan años en concluirse.
Sin embargo, RT France ha declarado que recurrirá la decisión ante el más alto tribunal de la UE, el Tribunal de Justicia.
“La confirmación por parte del tribunal de esta prohibición general (…) demuestra desgraciadamente que el poder judicial de la Unión Europea no puede o no quiere oponerse al poder político”, declaró la presidenta de RT Francia, Xenia Fedorova.
Dmitry Peskov, el portavoz del Kremlin, también prometió represalias contra los medios de comunicación europeos en Rusia.
“Esencialmente, RT ha sido bloqueado y no puede operar en Europa. Los europeos están pisoteando sus propios ideales”, dijo.
“Por supuesto, tomaremos medidas similares de presión sobre los medios de comunicación occidentales que operan en nuestro país”, añadió.
De todos modos, muchos medios de comunicación extranjeros abandonaron Rusia después de que ésta amenazara a los periodistas con 15 años de cárcel si no se atenían a las normas del Kremlin sobre la descripción de la guerra contra Ucrania como una “operación militar especial”.
El principal sindicato de periodistas holandés, Nederlandse Vereniging van Journaliste (NVJ), y grupos de derechos como Bits of Freedom, lanzaron en mayo un desafío legal separado contra la prohibición de la UE.
“Están castigando a los europeos, al no tratarlos como adultos”, dijo entonces Thomas Bruning, de la NVJ.