Soldados rusos se han desplegado en la ciudad de Tombuctú, en el norte de Malí, para entrenar a las fuerzas malienses en una base que dejaron vacante las tropas francesas el mes pasado, dijo el 6 de enero el portavoz del ejército de Malí.
El gobierno de Malí dijo el mes pasado que habían llegado al país “instructores rusos”, pero Bamako y Moscú han proporcionado hasta ahora pocos detalles sobre el despliegue, incluido el número de rusos desplegados.
El mes pasado, más de una docena de países occidentales condenaron enérgicamente el despliegue en Malí de mercenarios rusos que trabajan para el grupo Vagner, acusando a Moscú de proporcionar apoyo material a los combatientes.
Los países, entre los que se encontraban Francia, Alemania y el Reino Unido, afirmaron que el despliegue puede deteriorar la situación de la seguridad y los derechos humanos en Malí.
El Departamento de Estado de Estados Unidos dijo el mes pasado que las fuerzas del Grupo Vagner “no traerán la paz a Malí, sino que desestabilizarán aún más el país”.
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha dicho que el Grupo Vagner no representa al Estado ruso y no está pagado por él. También ha dicho que los contratistas militares privados tienen derecho a trabajar y perseguir sus intereses en cualquier parte del mundo, siempre que no infrinjan la legislación rusa.
El gobierno de Malí ha negado cualquier despliegue de mercenarios rusos, diciendo que los “entrenadores rusos” están en el país como parte de un acuerdo bilateral.
“Hemos tenido nuevas adquisiciones de aviones y equipos de [the Russians],” dijo el portavoz del ejército maliense a Reuters. “Cuesta mucho menos entrenarnos in situ que irnos para allá (…). ¿Cuál es el perjuicio?”
No dijo cuántos rusos habían sido enviados a Tombuctú.
Los residentes locales dijeron a Reuters que se vieron hombres rusos uniformados conduciendo por la ciudad.
No hubo comentarios inmediatos de los funcionarios rusos.
Francia ayudó a recapturar Tombuctú de militantes vinculados a Al Qaeda en 2013. La retirada de Francia de la ciudad es parte de una reducción significativa de una fuerza de tarea de 5.000 efectivos en la región del Sahel de África Occidental enviada para luchar contra los grupos yihadistas.
Malí ha experimentado una inestabilidad política sostenida desde 2012. Un gobierno militar de transición tomó el poder en mayo.