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No fue un suicidio”: Un grupo de derechos rusos publica más vídeos de supuestas torturas en prisión

El grupo ruso de derechos humanos Gulagu.net ha publicado nuevos vídeos que supuestamente muestran casos de tortura en un hospital penitenciario para enfermos de tuberculosis en Siberia.

El grupo publicó los últimos vídeos en YouTube el 20 de diciembre, diciendo que habían sido grabados en la enfermería para tuberculosos número 1 de la ciudad de Krasnoyarsk.

Según el grupo de derechos, los vídeos son los primeros del último lote de un archivo recopilado por el Servicio Federal de Seguridad (FSB) y el Servicio Penitenciario Federal (FSIN) de Rusia que un nuevo informante logró sacar del país en las últimas semanas.

Ni los funcionarios del FSB ni los del FSIN comentaron inmediatamente los vídeos.

Uno de los vídeos muestra a dos funcionarios del FSIN instruyendo a dos reclusos sobre cómo golpear y violar a un tercer recluso. Más tarde, un joven recluso es introducido en la sala, donde los dos reclusos le golpean. Lo empujan debajo de una cama y cubren la cama con colchones y mantas para amortiguar lo que está ocurriendo.

Un vídeo también muestra a un recluso cayendo desde una ventana. El fundador del grupo Gulagu.net, Vladimir Osechkin, afirma que el recluso murió.

“No fue un suicidio”, dice Osechkin.

Según Osechkin, los vídeos publicados representan menos del 1% del último lote de materiales que él y su grupo han obtenido.

Osechkin, que actualmente reside en Francia, ha publicado desde octubre otros vídeos que muestran las palizas y torturas a los reclusos por parte de los guardias, los empleados de la penitenciaría y otros reclusos.

En noviembre, publicó vídeos que mostraban casos de violación supuestamente grabados en una enfermería de la ciudad de Saratov. Osechkin ha dicho que los hombres implicados en las violaciones y torturas de los reclusos fueron contratados por el hospital de la prisión como gestores administrativos y enfermeros.

Osechkin dijo que eran supervisados por las ramas y direcciones regionales del FSIN y del FSB e identificó a algunos de ellos.

Según Osechkin, las grabaciones se entregaron a la administración de la enfermería, que las pasó como material clasificado al FSIN y al FSB. Los agentes del FSB y del FSIN reclutaron a las víctimas como informantes tras decirles que los vídeos se pondrían a disposición de otros reclusos si no cooperaban, dijo.

En los centros penitenciarios de Rusia y de la mayoría de las antiguas repúblicas soviéticas, los homosexuales y los reclusos que han sido violados son tratados como parias, se enfrentan a humillaciones a diario y son obligados a realizar trabajos sucios de poca importancia.

En octubre, Osechkin dijo que su grupo obtuvo un gran lote de vídeos que mostraban a oficiales del FSB y del FSIN utilizando la violación y otras formas de tortura para obligar a los reclusos a cooperar.

El material de Osechkin -publicado en YouTube- provocó una protesta pública y dio lugar a investigaciones en la dirección del FSIN y en centros penitenciarios de la región de Saratov.

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