Casi 800 personas en tres barcos de rescate de ONGs permanecen varadas en el mar en el Mediterráneo en vísperas de las fiestas navideñas.
Los barcos benéficos esperan desembarcar a las personas que rescataron, incluidos bebés y recién nacidos, pero aún no se les ha asignado un puerto de seguridad de ningún estado de la UE. La mayoría de los desembarcos tienen lugar en Italia.
El barco de rescate humanitario Geo Barents, dirigido por Médicos sin Fronteras, lleva 458 personas a bordo. La organización benéfica Sea-Eye-4, con sede en Alemania, lleva 216, mientras que el Ocean Viking, de SOS Mediterranee, lleva 114.
El Ocean Viking dijo que hasta ahora ha enviado seis solicitudes para el lugar de seguridad, pero sin respuesta.
“A pesar de los máximos cuidados proporcionados por los equipos del Ocean Viking, los signos de fatiga, agotamiento y ansiedad están aumentando entre los supervivientes”, dijo el jueves (23 de diciembre).
Entre los que se encuentran a bordo hay un recién nacido de apenas unas semanas, rescatado con 11 días de vida.
“Ha pasado casi la mitad de su vida en el mar”, señaló SOS Mediterranee.
Este tipo de enfrentamientos con las autoridades son la norma, creando un estrés adicional entre los que están a bordo dada la incertidumbre de sus destinos.
Las peticiones de las ONG se producen después de que unas 160 personas murieran frente a las costas de Libia en sus esfuerzos por buscar refugio y una vida mejor en la UE.
“Las nuevas muertes han elevado el recuento en la ruta del Mediterráneo central a unos 1.500 migrantes ahogados este año”, dijo Safa Msehli, de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), a principios de esta semana.
Unos 31.500 migrantes fueron interceptados y devueltos a Libia en 2021, frente a los casi 11.900 del año anterior, según la OIM.
Las cifras se suman a otros informes recientes de muertes por ahogamiento en el mar Egeo entre Turquía y Grecia.
Las autoridades griegas dijeron que creen que es probable que decenas de personas hayan muerto después de que un barco que transportaba hasta 50 personas se hundiera frente a la isla de Folegandros.
La Guardia Costera griega, en un comunicado, dijo que 12 personas habían sido rescatadas.
Otras 27 murieron a finales de noviembre cuando intentaban cruzar el Canal de la Mancha desde la costa francesa.