Jesus Muñoz 
Un grupo bipartidista de legisladores estadounidenses presentó el viernes una resolución que caracteriza las acciones de Rusia en Ucrania como un acto de genocidio.
Un borrador de la resolución, visto por Foreign Policy, sostiene que las atrocidades cometidas por las tropas rusas en Ucrania, incluidos los ataques indiscriminados a civiles, el ataque directo a hospitales de maternidad e instalaciones médicas, y el traslado forzoso de cientos de miles de ucranianos a Rusia y a territorio controlado por Rusia, cumplen los criterios establecidos en el artículo II de la Convención de las Naciones Unidas para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio.
Las resoluciones del Congreso son utilizadas habitualmente por los legisladores para expresar los sentimientos más fuertes de los miembros de la Cámara de Representantes o del Senado. Aunque la resolución no es jurídicamente vinculante, envía un fuerte mensaje de condena de las acciones de Rusia e indica los esfuerzos en curso de los miembros del Congreso para proporcionar un apoyo continuo a Ucrania más allá de la ayuda militar.
Un grupo bipartidista de legisladores estadounidenses presentó el viernes una resolución que califica las acciones de Rusia en Ucrania como un acto de genocidio.
Un borrador de la resolución, visto por Foreign Policy, sostiene que las atrocidades cometidas por las tropas rusas en Ucrania, incluidos los ataques indiscriminados a civiles, el ataque directo a hospitales de maternidad e instalaciones médicas, y el traslado forzoso de cientos de miles de ucranianos a Rusia y a territorios controlados por Rusia, cumplen los criterios establecidos en el artículo II de la Convención de las Naciones Unidas para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio.
Las resoluciones del Congreso son utilizadas habitualmente por los legisladores para expresar los sentimientos más fuertes de los miembros de la Cámara de Representantes o del Senado. Aunque la resolución no es jurídicamente vinculante, envía un fuerte mensaje de condena de las acciones de Rusia e indica los esfuerzos en curso de los miembros del Congreso para proporcionar un apoyo continuo a Ucrania más allá de la ayuda militar.
En abril, el presidente estadounidense Joe Biden calificó las atrocidades rusas en Ucrania como un acto de genocidio. “Dejaremos que los abogados decidan a nivel internacional si se puede calificar o no, pero a mí me parece que sí”, dijo, en declaraciones a los periodistas en Iowa. Los comentarios de Biden fueron secundados por los primeros ministros canadiense y británico, mientras que el presidente francés, Emmanuel Macron, y el canciller alemán, Olaf Scholz, se negaron a utilizar el término, lo que subraya las diferencias de larga data dentro de la comunidad internacional en cuanto a lo que constituye un genocidio.
Como crimen, el genocidio es distinto de otras atrocidades masivas, y se define en la Convención sobre el Genocidio de las Naciones Unidas como “actos cometidos con la intención de destruir, total o parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso.” Desde 1989, el Departamento de Estado de EE.UU. ha reconocido ocho genocidios, el más reciente de los cuales ha sido la declaración de genocidio contra los musulmanes rohingya en Myanmar. Las designaciones de genocidio por parte de Estados Unidos pueden llevar años de recopilación y análisis de pruebas, y los altos funcionarios de la administración Biden señalaron que las declaraciones del presidente en abril no constituían un cambio de política formal de Estados Unidos.
Argumentando que los acontecimientos en Ucrania podrían constituir un genocidio, la resolución señala las declaraciones realizadas en los medios de comunicación estatales rusos y por altos funcionarios, incluido el presidente ruso Vladimir Putin, que socavan la condición de Estado y la soberanía de Ucrania; la resolución del Congreso alega que las atrocidades se llevaron a cabo con un propósito específico. Demostrar que los crímenes se llevaron a cabo con una intención genocida deliberada puede ser a menudo difícil de probar en la ley.
Varios soldados y unidades rusos -acusados de cometer crímenes de guerra en el suburbio kievita de Bucha, concretamente torturas, violaciones y ejecuciones sumarias de civiles- fueron galardonados con en abril por Putin, que designó a la 64ª Brigada de Fusileros Motorizados como Guardias y los elogió por su “heroísmo y valor de masas, tenacidad y valor”.
La resolución será presentada por el representante demócrata Steve Cohen y se espera que sea copatrocinada por un grupo bipartidista de miembros de la Cámara de Representantes que forman parte de la Comisión de Helsinki, un organismo independiente del gobierno estadounidense encargado de promover los derechos humanos y la seguridad en Europa. En abril, la comisión escribió al presidente de la Asamblea Parlamentaria de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa para respaldar una declaración aprobada por el parlamento ucraniano en la que se calificaban las acciones de Rusia de genocidio y se instaba a la asamblea a aprobar una resolución similar.
