El Departamento de Justicia ha informado al equipo legal del ex vicepresidente Mike Pence que no presentará cargos penales relacionados con el descubrimiento de documentos clasificados en su casa de Indiana.
El departamento envió una carta al abogado de Pence el jueves informando a su equipo que, después de una investigación sobre el posible mal manejo de información clasificada, no se buscarán cargos criminales. Un funcionario del Departamento de Justicia confirmó la autenticidad de la carta, obtenida por Associated Press.
La noticia llega días antes de que Pence lance el miércoles en Iowa su campaña por la nominación republicana a la presidencia, una carrera que le pondrá en competencia directa con su antiguo jefe, el expresidente Trump.
Nunca surgieron pruebas que sugirieran que Pence ocultó intencionadamente ningún documento al Gobierno o que siquiera supiera que estaban en su casa, por lo que nunca hubo expectativas de que el ex vicepresidente se enfrentara a cargos. Pero la decisión del Gobierno y el momento en que se produce son, no obstante, una buena noticia para el equipo político de Pence antes de su entrada en la contienda de 2024.
El fiscal general Merrick Garland había nombrado a un abogado especial para supervisar la investigación del Departamento de Justicia sobre el manejo de Trump de documentos clasificados, así como los esfuerzos de Trump para anular los resultados de las elecciones de 2020, sólo tres días después de que Trump lanzara formalmente su campaña de 2024 – un reconocimiento de las altas apuestas políticas.
En enero se descubrieron documentos clasificados en casa de Pence, después de que éste pidiera a sus abogados que registraran sus pertenencias como vicepresidente. El abogado de Pence, Greg Jacob, escribió en una carta a los Archivos Nacionales que los documentos, que fueron entregados inmediatamente al FBI, “fueron inadvertidamente empaquetados y transportados” a la casa de Pence al final de la pasada administración.
El FBI descubrió un documento adicional con marcas clasificadas en la casa de Indiana durante un registro al mes siguiente.
Más allá de Pence, los asesores especiales del Departamento de Justicia siguen investigando el manejo de documentos clasificados encontrados en casas u oficinas tanto de Trump como del presidente Biden, de cuando era vicepresidente.
El estado de la investigación sobre los documentos de Biden no está claro, pero la investigación sobre Trump ha dado muestras de estar llegando a su fin. Los fiscales parecen estar cerca de tomar una decisión sobre si presentar cargos penales contra el expresidente o cualquier otra persona.
El equipo dirigido por el abogado especial Jack Smith ha puesto a una amplia muestra de testigos ante un gran jurado federal que investiga a Trump, incluidos antiguos y cercanos ayudantes de Trump. La investigación se ha centrado no sólo en si Trump poseía ilegalmente unos 300 documentos marcados como clasificados, sino también en si obstruyó los esfuerzos del gobierno para asegurar su devolución.[