Es hora de una cooperación más geopolítica entre la UE y Turquía

Está claro que la relación estratégica entre Turquía y la UE ha empeorado en los últimos años. Sin embargo, por mucho que Turquía necesite a la Unión Europea y a la OTAN para su seguridad, la UE y la OTAN también necesitan a Turquía.

En algunas áreas de vecindad cruciales, la UE debería considerar la posibilidad de cooperar con Turquía de forma mucho más estratégica.

En una lista no exhaustiva, Turquía podría desempeñar un papel importante en Siria, en los Balcanes Occidentales, en el Mar Negro y en Afganistán.

Una mayor cooperación estratégica no significa que la UE deba dejar de presionar a Turquía en materia de derechos humanos y libertad de los medios de comunicación. Al mismo tiempo, los europeos deben reconocer que Turquía es más que su presidente.

Siria

Desde el inicio del conflicto en Siria en 2011, Turquía ha desempeñado un papel esencial, al que se vio arrastrada casi inevitablemente debido a su larga frontera con Siria.

Turquía era uno de los pocos países donde la gente podía huir de los bombardeos del régimen de Assad.

El país fue también uno de los pocos que proporcionó ayuda a los campos de refugiados dentro de Siria, ya que la ayuda internacional pasaba por Damasco y, por tanto, apenas llegaba a las zonas controladas por la oposición.

Turquía comenzó a intervenir militarmente de forma directa en Siria en 2016, después de que Occidente rechazara la petición de una zona de exclusión aérea. La ocupación turca de dos zonas del norte de Siria supuso la instalación de facto de una zona de exclusión aérea sobre estas áreas, bloqueando a las fuerzas de Assad y a las de Rusia.

Turquía acordó con Rusia iniciar conversaciones de paz en Astana (actual Nur Sultan) en diciembre de 2016, incluso con Irán, para negociar un alto el fuego.

El proceso de Astana, que sigue en marcha, se inició sin la participación de Europa ni de Estados Unidos.

El hecho de que la UE y Estados Unidos sigan sin estar incluidos oficialmente en el proceso de paz de Siria hace que Turquía sea nuestro (único) socio en la mesa de negociaciones.

Sólo hay una manera de detener las masacres y el flujo de refugiados, y es encontrar una solución para Siria. Para ello, la UE necesita a Turquía.

Balcanes occidentales

Mientras tanto, la Unión Europea está perdiendo credibilidad en los Balcanes Occidentales.

Mientras que Eslovenia y Croacia ya se han adherido a la UE, varios Estados miembros de la UE dudan en ir más allá, a pesar de las promesas anteriores.

La apertura de las conversaciones de adhesión con Macedonia del Norte y Albania ya debería ser un hecho, ya que ambos países cumplían los requisitos del proceso.

Sin embargo, los Países Bajos, Francia y Bulgaria han estado bloqueando la adhesión de ambos países.

Como resultado, ahora vemos que se está gestando una crisis política en Macedonia del Norte. Otros países, como Serbia, Kosovo y Bosnia y Herzegovina, están empeorando -en lugar de mejorar- en las tablas de puntuación de la corrupción, el Estado de derecho y la reconciliación.

Con su proceso de ampliación estancado, la UE está perdiendo influencia en la mayoría de los países de los Balcanes Occidentales.

Debido a su historia, la mayoría de los países de los Balcanes Occidentales ven a Turquía como un intermediario honesto. Turquía conoce la región sin apoyar firmemente a una de las partes.

Como las tensiones están aumentando en Bosnia y Herzegovina, y entre Serbia y Kosovo, la UE podría necesitar la experiencia de Turquía para rebajarlas y encontrar soluciones.

Región del Mar Negro

La Unión Europea carece de capacidades militares, pero también de estrategia militar. Desde que el Reino Unido abandonó la UE, Francia es la única potencia militar del bloque.

Francia y Turquía han estado en bandos opuestos en conflictos como el de Libia, y en la política de Oriente Medio en general. Francia, antigua aliada de Armenia, no apreció el apoyo abierto de Turquía a Azerbaiyán y su conquista de Nagorno-Karabaj.

Es hora de dejar de lado estos enfrentamientos y empezar a pensar de forma más estratégica en el Mar Negro. Turquía es un socio necesario y esencial en la región del Mar Negro.

Una mayor cooperación estratégica entre la UE y Turquía es el único camino para detener el expansionismo ruso.

Migración

La migración no es un problema de seguridad, sino una consecuencia de los problemas de seguridad.

Sin la guerra en Siria, el ascenso del ISIS y los crueles bombardeos del régimen de Assad, nunca habría habido una crisis de refugiados sirios en 2015.

Si Libia no hubiera colapsado políticamente en 2013, no habríamos visto las miles de pateras tratando de llegar a suelo europeo, y decenas de miles de refugiados ahogándose en el Mediterráneo.

Tanto en el caso de Siria como en el de Libia, se podría haber evitado un colapso total. En Siria, una zona de exclusión aérea habría salvado muchas vidas y habría cambiado el curso de la guerra.Nunca habría habido el caos que hemos visto y, por lo tanto, no se habría producido la toma del ISIS de grandes partes del territorio sirio.

También Libia podría haber evitado la violencia si el bloqueo político de 2013 se hubiera resuelto políticamente.

Todos los que conocen Libia vieron venir el naufragio y podrían haberlo detenido. No se ha hecho, sobre todo por los desacuerdos internacionales. Tenemos que aprender las lecciones de estos dos conflictos si queremos evitar otra crisis de refugiados. Por tanto, debemos apoyar en la medida de lo posible el actual proceso político de transición en Libia.

Y lo que es más importante, la UE y Turquía deben mantener los ojos abiertos ante posibles nuevos conflictos que empujen a la gente a huir de sus países.

Obviamente, está Afganistán, donde Turquía ya está desempeñando un papel de seguridad. Una segunda zona de conflicto posible es Irak, país vecino de Turquía. Están los Balcanes Occidentales y la región del Mar Negro.

Para cada uno de estos posibles conflictos no hay otra vía para Turquía y la UE que la cooperación. Por lo tanto, es hora de que la UE y Turquía dejen de lado las sensibilidades del pasado, aunque aprendiendo de ellas, y busquen urgentemente una colaboración estratégica al más alto nivel.

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