Carolina Ortega 
TEHERÁN – Cientos de empleados de la judicatura iraní se reunieron frente al edificio del Parlamento en Teherán en el segundo día de protestas por la falta de aumentos salariales a pesar de las promesas anteriores del gobierno.
Muchos de los asistentes a la rara manifestación del 9 de enero expresaron su ira contra el presidente del Parlamento, Mohmmad Baqer Ghalibaf, coreando “mentiroso, mentiroso” y “Ghalibaf, desgracia”.
Ebrahim Raisi, el presidente ultraconservador iraní que asumió el cargo en agosto, había propuesto aumentos salariales en las últimas semanas de su anterior trabajo como jefe judicial.
Pero el nuevo gobierno ha rechazado desde entonces las subidas salariales en medio de las graves dificultades económicas causadas en parte por las paralizantes sanciones impuestas por Estados Unidos cuando se retiró del acuerdo nuclear con Irán en 2018.
AFP informó que los manifestantes coreaban: “¡Si nuestro problema no se resuelve, cerraremos el sistema de justicia!”
Los videos publicados en línea han mostrado protestas similares de los empleados del poder judicial en otras ciudades, incluyendo Karaj.
Mohammad Hossein Aghasi, abogado, tuiteó desde el tribunal de Karaj el 8 de enero que los “tribunales de la ciudad prácticamente no funcionan, los jueces se han negado a comparecer en el tribunal”.
También se refirió a una “huelga de una semana de los jueces” y dijo que “nunca había visto tales huelgas o protestas de los jueces desde 1974.”
El periódico reformista Arman Melli informó de que “algunos funcionarios judiciales organizaron concentraciones [on January 8] en la mayoría de las ciudades del país para protestar por el rechazo al plan del Parlamento de aumentar sus salarios”.
Meysam Latifi, jefe de la Organización de Asuntos Administrativos y de Contratación, dijo en el parlamento la semana pasada, cuando se rechazó un aumento salarial, que “nos preocupa la demanda de aumentar los salarios judiciales porque eso llevaría a lo mismo en otros organismos.”
Con información de AFP
