Los diplomáticos de la UE han instado a la “calma” en medio de la escalada de la retórica rusa contra Lituania, miembro de la OTAN, que ha provocado que se hable de “Tercera Guerra Mundial” en las redes sociales.
“He pedido a la parte rusa que mantenga la calma y no escale [the situation] verbalmente o con acciones”, dijo el embajador de la UE en Rusia, Markus Ederer, el martes (21 de junio) en Moscú, según la agencia de noticias rusa Tass.
Habló tras ser convocado por el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, que se quejó de lo que Moscú califica de bloqueo del exclave ruso de Kaliningrado por parte de Lituania.
Kaliningrado se encuentra entre Lituania y Polonia, en el Mar Báltico.
Lituania comenzó a bloquear el sábado el tránsito de mercancías rusas sancionadas por la UE, siguiendo las instrucciones de la Comisión Europea.
Las mercancías sancionadas incluyen el carbón, el acero, el hierro, la madera, el caviar, el vodka y el petróleo, y las prohibiciones se aplicarán gradualmente, empezando por los envíos de metales.
También se prohíben los vuelos directos de los aviones rusos sobre el espacio aéreo de la UE, por lo que habrá que sobrevolar el Mar Báltico en su lugar, añadiendo 40 minutos a su viaje.
La medida lituana provocó compras de pánico en Kaliningrado, según The Moscow Times, a pesar de que las sanciones de la UE no cubren el tránsito de pasajeros o artículos básicos, como los alimentos.
“El tránsito de personas y mercancías no afectadas por las sanciones funciona con normalidad”, dijo también en Moscú Ederer, el embajador de la UE.
“No hay ningún bloqueo de Kaliningrado”, dijo también el martes a la prensa en Vilna la primera ministra lituana, Ingrida Šimonytė.
Pero por todo ello, los altos cargos, portavoces y medios de comunicación rusos multiplicaron sus amenazas contra Lituania si no daba marcha atrás.
“Rusia responderá sin duda a esas acciones hostiles”, dijo Nikolai Patrushev, jefe del Consejo de Seguridad ruso, tras volar a Kaliningrado. “Sus consecuencias tendrán un grave impacto negativo en la población de Lituania”.
“Las represalias llegarán”, dijo el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso.
“Las consecuencias, por desgracia, llegarán”, añadió la portavoz del ministerio, Maria Zakharova.
Otros fueron más beligerantes. “La OTAN comienza el bloqueo de la región rusa con la ayuda de Lituania, es una agresión directa contra Rusia, que nos obliga a recurrir a la autodefensa”, dijo Andrei Klimov, un alto senador ruso.
La escalada verbal de Rusia se produce después de que uno de sus diputados presentara un proyecto de ley para desreconocer la independencia de Lituania.
También se produce cuando los líderes de la UE se preparan para designar a Ucrania como “candidato” a la adhesión en una cumbre que se celebrará en Bruselas a finales de esta semana, en medio de las advertencias de Kiev de que lo más probable es que Moscú organice una provocación para desestabilizar las conversaciones de la UE.
La retórica rusa provocó una oleada de comentarios nerviosos en las redes sociales sobre el riesgo de un choque militar entre Rusia y la OTAN.
El poco conocido “Kaliningrado” fue uno de los hashtags más populares en Twitter el martes.
La franja de tierra entre Bielorrusia y Kaliningrado es estratégicamente importante porque si las fuerzas rusas y bielorrusas se apoderan de ella, cortarían a los tres Estados bálticos del resto de Europa.
Por su parte, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, y el gobernador de Kaliningrado, Anton Alikhanov, también se quejaron de que la prohibición de tránsito de Lituania violaba los tratados internacionales.
Pero esta línea fue recibida con desprecio en Vilnius.
“Es irónico escuchar la retórica sobre las supuestas violaciones de los tratados internacionales de un país [Russia] que ha violado posiblemente todos los tratados internacionales”, dijo Šimonytė.
Morgana Danielė, diputada lituana, señaló que el tránsito de vodka ruso estará prohibido a partir del 10 de julio, pero bromeó diciendo que Kaliningrado debería agradecerlo a la UE.
“Kaliningrado nos debe un favor por una vida sobria, el resto de Rusia debería seguir el modelo y ponerse sobrio cuanto antes”, dijo.
Y las advertencias de Rusia tampoco tuvieron mucho efecto en Bruselas, por ahora.
“Lo único que cambiaría el pensamiento de la UE sobre las sanciones es que Rusia retirara sus tropas de Ucrania y detuviera la guerra”, dijo un portavoz de la Comisión.
Mientras tanto, los ministros de la UE reunidos en Luxemburgo expresaron su creciente apoyo al estatus de candidato de Ucrania.
Francia, Alemania, Italia y Polonia apoyan la medida. Dinamarca, que anteriormente había planteado objeciones sobre la corrupción ucraniana, dijo que también estaba a bordo.
“Es algo que Dinamarca apoya de todo corazón. Queremos ayudar a Ucrania a alcanzar su sueño europeo”, dijo el ministro de Asuntos Exteriores danés, Jeppe Kofod.
“Estamos trabajando para llegar al punto de decir [Russian president Vladimir] Putin que Ucrania pertenece a Europa”, dijo el ministro de Asuntos Exteriores de Luxemburgo, Jean Asselborn.
¿Hungría resiste?
La UE está negociando la imposición de una séptima ola de sanciones a Rusia.
“Se seguirá trabajando en las sanciones, incluso para reforzar su aplicación y evitar que se eludan”, pretenden decir los líderes de la UE en la cumbre, según el último proyecto de conclusiones fechado el 20 de junio y visto por novedades24.
Sin embargo, Hungría, país amigo de Rusia, que ya vetó anteriores medidas de la UE, sigue frenando el proceso, según fuentes diplomáticas.
“Ellos [Hungary] no están bloqueando realmente, ya que no hay ninguna propuesta concreta [for the 7th round] sobre la mesa, sólo enviando señales de que tendrían dificultades con el próximo paquete en este momento”, dijo un diplomático de la UE.