Alberto Vega 
MINSK — Un tribunal de Minsk ha condenado a cuatro activistas anarquistas a largas penas de prisión en el marco de la actual represión contra quienes cuestionan los resultados oficiales de las elecciones presidenciales del año pasado, que dieron la victoria al hombre fuerte Alyaksandr Lukashenka.
El 22 de diciembre, el juez del tribunal regional de Minsk Valer Tuleyka condenó a Ihar Alinevich y Syarhey Ramanau a 20 años de prisión cada uno, mientras que a Dzmitry Razanovich le impuso 19 años y a Dzmitry Dubouski 18 años de prisión.
El tribunal declaró a los acusados culpables de terrorismo y de posesión y uso ilegal de armas y explosivos. Dubouski y Alinevich también fueron condenados por el transporte ilegal de armas de fuego y explosivos a través de las fronteras estatales.
Los cuatro hombres fueron acusados a finales de octubre de 2020 tras ser detenidos cuando intentaban cruzar la frontera entre Bielorrusia y Ucrania. Todos ellos rechazan los cargos por considerarlos políticamente motivados.
Crisis en Bielorrusia
Lea nuestra cobertura actual mientras el hombre fuerte de Bielorrusia, Alyaksandr Lukashenka, continúa con su brutal represión de las ONG, los activistas y los medios de comunicación independientes tras las elecciones presidenciales de agosto de 2020, ampliamente consideradas como fraudulentas.
El juicio, celebrado a puerta cerrada, comenzó a mediados de noviembre.
Los investigadores dijeron que los anarquistas incendiaron varios coches de policía durante las protestas, así como un edificio de la policía de tráfico y la oficina del Comité Forense del Estado en la región sudoriental de Homel.
Los activistas de los derechos y los políticos de la oposición afirman que los comicios fueron amañados para prolongar los 26 años de gobierno de Lukashenka. Miles de personas han sido detenidas durante las protestas en todo el país y ha habido informes creíbles de tortura y malos tratos por parte de las fuerzas de seguridad. Varias personas han muerto durante la represión.
Muchos de los líderes de la oposición bielorrusa han sido detenidos u obligados a abandonar el país, mientras que Lukashenka se ha negado a negociar con la oposición.
Estados Unidos, la Unión Europea y otros países se han negado a reconocer a Lukashenka como ganador de la votación y han impuesto varias rondas de sanciones a él y a su régimen, alegando el fraude electoral y la represión policial.
Con material proporcionado por el centro de derechos humanos Vyasna
