Junto con un acuerdo sobre Eurodac y el cribado, el Consejo Europeo quiere mostrar su voluntad de avanzar en los expedientes de migración en curso sacando estos expedientes del paquete completo. Cuanto más rápido, mejor.
No hace falta decir que acojo con satisfacción su búsqueda de la solidaridad y su deseo de concluir Eurodac y el cribado. Ambos expedientes son esenciales para acelerar la protección de nuestras fronteras, reforzar la seguridad en suelo europeo y mejorar el intercambio de información en toda la UE. Por ejemplo, actualmente no podemos vincular los cruces irregulares de fronteras a personas concretas.
Por lo tanto, puede ocurrir que registremos tres cruces irregulares, pero que en realidad estén vinculados a la misma persona.
En segundo lugar, queremos proteger a las víctimas de la trata, concretamente a los menores, y ayudar a la identificación y protección de los niños desaparecidos. Hoy en día, no registramos las huellas dactilares de los niños de seis años, lo que hace imposible identificar o localizar a los menores cuando desaparecen.
Otra razón por la que necesitamos actualizar nuestro sistema actual es la lucha contra el cruce irregular de fronteras en sí, así como para identificar los movimientos secundarios de los nacionales de terceros países reasentados. La actualización de Eurodac abordará estas cuestiones si lo hacemos de la manera correcta, con las garantías necesarias.
El control es igualmente importante. Es esencial saber exactamente quién entra en la UE y cuándo. No sólo para mejorar la seguridad en Europa, sino también para proporcionar a los inmigrantes el apoyo necesario.
Al incluir este procedimiento de selección sabremos si la persona es una amenaza para la seguridad, qué vulnerabilidades tiene y si necesita atención médica específica o alojamiento concreto, por ejemplo. Necesitamos un enfoque migratorio a medida y este reglamento lo hará posible.
Por último, el mandato del Consejo iba acompañado de una declaración política, en la que se establecía que la reubicación seguiría siendo voluntaria, o bien los Estados miembros aceptaban un mínimo de 10.000 migrantes al año o contribuían mediante ayudas financieras a ayudar a otros Estados que recibían migrantes.
Para que este compromiso sea operativo y concreto, se creará una plataforma de solidaridad para que los estados receptores intercambien información sobre sus necesidades reales sobre el terreno y para que los demás contribuyan de forma adecuada a estas necesidades.
No a las sanciones
No se prevén sanciones en caso de que un Estado no actúe de acuerdo con la declaración. Las sanciones financieras podrían introducirse en una fase posterior.
La oferta total de solidaridad que está sobre la mesa tras la reunión del Consejo es de unas 7.000 reubicaciones. La aspiración es llegar a 10.000. Este claro mensaje de solidaridad es importante, ya que no sólo deben ser los Estados miembros en primera línea los que inviertan en la gestión de la migración y el apoyo a los refugiados. Todos los Estados deberían poner de su parte.
Sin embargo, esta declaración, el procedimiento de selección y Eurodac son una cáscara vacía si no adoptamos los demás expedientes del paquete migratorio.
La mayoría del Parlamento Europeo sigue convencida del enfoque del paquete y también quiere avanzar en otros expedientes esenciales que afectan al núcleo de nuestra política europea, como la reubicación, la gestión de la migración y los procedimientos, por ejemplo.
La seguridad es sólo un elemento del debate, la cuestión es mucho más compleja de lo que se podría pensar.
Estos expedientes son como una cadena, si se quita un eslabón, la cadena deja de existir. Tenemos que abordar el núcleo de nuestro actual sistema de migración, de una manera de 360 grados. De lo contrario, es un hecho que nuestra política fracasará, poniendo en peligro a los refugiados más vulnerables, como los niños, las mujeres y las personas LGBTIQ+.
En 2016, hace ya 6 años, desaparecieron 10.000 niños desplazados, y mientras tanto, otros más no pudieron ser contabilizados. Desde que la Comisión Europea presentó su comunicación sobre los menores no acompañados y el paquete migratorio actualizado, nada ha cambiado sobre el terreno.
Al contrario, la actual crisis climática, la pandemia y las guerras en todo el mundo no han hecho más que agravar los problemas existentes. Registramos retrocesos en toda Europa, muertes a través de los mares, más niños y mujeres desaparecidos y explotados, largos procedimientos, refugiados sin alojamiento, etc.
Una verdadera crisis de nuestro sistema, no una crisis de los migrantes. No es su responsabilidad abordar los problemas actuales, es la nuestra.
Hoy en día hay 100 millones de personas desplazadas en el mundo y sólo el año pasado hubo 650.000 solicitudes de asilo en la UE.
Debemosgarantizar que la UE esté preparada para afrontar de una vez los problemas que se presenten. Con sólo controlar, tomar las huellas dactilares o reubicar a (algunos) refugiados, o externalizando nuestro control de fronteras a Turquía y dándole a Erdogan nuestras llaves, no resolveremos los problemas actuales.
Por tanto, es hora de ser valientes, reformar a fondo nuestra actual política migratoria y recuperar el control.
Debemos conseguir un verdadero sistema europeo común de asilo, que proteja nuestra seguridad, pero que también proteja a las personas vulnerables, como los niños. Pido al Consejo que haga lo mismo y que avance en todos los expedientes abiertos. Eso es lo que los ciudadanos europeos esperan de nosotros.